mi vida en el Salvador en los ojos de Jose el salvadorenho

Quiooonnnssuueeelooooooo, el saalvadooor!!!!!!!!! (vease storytelling de solondz)
Por cierto, no hay egnes ni tildes, sometidos al arbitrio de las torres de babel lexico electronicas otra vez.
Porque mis dias en El Salvador estaban ya filtrados por los pasos de mi amigo Jose, que preparo el camino, regalo de nuevo viejo amigo. Orel, ya lo conoceis algunos, el pintor que tiene una sonrisa cosida a la cara y que ahora va dejando unos suenhos por Barcelona porque para alla sigue su viaje.
Tres horas despues de lo prometido, llego a San salvador, y a la casa de donha Rosa Donhan, la mama de Jose y de Carlos, cinco minutos despues ya era su hijo espanhol. Pupuseamos, como era de ley. Que buenas las pupusas, hmmm, la comida omnipresente en el Salvador, ya apunte como hacerlas. Y con chocolate caliente. Todos hablaban de lo extranho que era el tiempo esos dias, cuando estuve, por las noches, hacia frio. Venia reventado de las horas de carretera, pero Rosa y Lucia, la tia amorosa de Jose, estaban ansiosas por escuchar las nuevas de los hermanos donhan. Tambien parecian estarlo las perritas, Gala y Peseta (unos dias despues me entero de que en realidad se llama Princesa, divergencias en las pronunciaciones...) Ocupo el estudio de Jose, por primera vez en ni me acuerdo duermo en cama, sin saco y gigante. Toco la cama y vuelvo a abrir los ojos doce horas despues para comer el super desayuno que me regalaba diario mi mama salvadorenha, huevos revueltos, frijoles, queso, pupusas, atol, cafe, licuado...bien mimado estuve. Todas las manhanas.
La vida en San Salvador se me hizo un poco gringa, casi todo sucede en los centros comerciales o en las casas de las colonias. Algunos de los que conoci tenian anhos de no andar por el centro, bien peligroso, o eso me transmitieron. Asi me explicaban en la tertulia diaria de los amigos de Jose en el cafe del centro comercial porque se reunian en el cafe del centro comercial. La bola de los amigos de Jose, hablando de la vida, del arte, de mil anecdotas de Jose, me encanto. Stivella, el Grecco, Gerardo, el poeta, Oscar, Cindy...Me hicieron sentir bien esperado y querido,
Pero tambien fui testigo de la locura del centro. Alla me llevo Rosa al mercado a comprar frutas, bien loco y desordenado, tambien fuimos al palacio nacional. Todo con su encanto, pero en verdad bien loco. Con el claxon de los carros como banda sonora.
Tambien es religioso en extremo, exagerado. Pones la television (tenia tele en mi cuarto!) y ves a un hip hopero con camisa de 60 anhos, rapeando bien enojado, pones el volumen y esta predicando mientras la gente le aplaude. A todas horas, dos de los cinco canales son evangelicos. Rosa y Lucia son catolicas fervorosas, bendecian la mesa y daban gracias a dios por todo. Me acordaba de cierta noche en Gijon y ya dejo las complicidades...
Y Gerardo, el primo de Jose (mi primo de alla, claro) me regalo el resto del Salvador, gracias! y tambien ha prometido regalar algunas de las fotos que hizo. Visita a la puerta del diablo, una montanha desde donde se ve el volcan de nome acuerdodelnombre (tantas cosas se llaman a si en latinoamerica), la ciudad a lo lejos de San Salvador, un lago que se llama igual que el volcan y el mar Pacifico. Tambien me llevo a la playa de la libertad y nos banhamos en sus pacificas costas. que dia grande!, solo nos falto poder ver el gol de chilena de ronaldinho.
Una semana bien familiar, entre amigos y hospitalidad. De mucho buen dormir y buen comer, en verdad lo echaba de menos. Y sobre todo, el ser testigo de los pasos de mi buen amigo. Como le quieren por aca, aunque claro, como no. Por cierto buenisimas fotos en su casa con su chupa de cuero y pelo largo! Con pena me arranco a seguir hacia Nicaragua. El bus sale a las 5 de la manhana, yo tambien creia que esa hora no existia. Desayuno una pinha que creo, tenia truco. El viaje son 12 horas, me paso 11 y media vomitando cada 15 minutos, el peor viaje de mi vida!, pero bueno, ya poso mis pies en Nicaragua....